De las montañas al desierto con una buena capa de pintura !!

Tras un mes de descanso bloguero pero intenso en visitas, me dispongo a resumir estas últimas semanas.

Todo empezó con la visita de Schere (y Marcos, su guardaespaldas veggie). Es complicado venir hasta India, requiere tiempo y dinero por lo que visitas como éstas se agradecen, me gustaría tener al resto por aquí, pero entiendo que son tiempos difíciles, especialmente para la gente de nuestra edad. El periplo empieza con HOLI, la fiesta en la que los indios dan la bienvenida a la primavera y a las nuevasy renovadas energías que ésta trae. Un festival en el que durante un día entero la gente se lanza pinturas y agua por las calles ... Empezamos impolutos y acabamos ... juzgad!

Con Schere, y entre parada y parada en los WCs (pobriña, vaya virus estomacal que se pilló!), visité Nepal. Me dejó algo frío, Kathmandu no deja de ser otra ciudad colapsada y llena de mierda, además de que son unos careros y te cobran por entrar en los cascos históricos de las ciudades. Vimos los alrededores y el amanecer desde una montaña en la que se veían algunos picos de los Himalayas. Buddha presente en todos lo sitios y la corriente eléctrica brillando por su ausencia (en la ciudad los barrios se turnan para tenerla). Hasta tal punto que se fue la luz en el propio aeropuerto!!!! Y no, no da muy buen rollo eso ... Supongo que lo bonito de Nepal es la zona de Phokara, más natural y cercana a la smontañas, pero los días de vacaciones son los que son y se necesitan varios para ir hasta allí. Una cosa que me impresionó fue el templo hindú que visitamos antes de irnos, habría al menos 8 cremaciones al mismo tiempo, tuvimos cuerpos ardiendo a escasos metros, viendo sus rituales ante la muerte ... en la penúltima foto, el humo que se aprecia, viene de cada pila funeraria ...

Antes de la visita familiar, tuve tiempo de irme con Iria a Jaisalmer, la ciudad más alejada del Rajasthan, a muy pocos kilómetros de Pakistán, 17 horas de ida y 17 de vuelta en tren para estar allí unas escasas pero bien aprovechadas 30. El fuerte de la ciudad es el único habitado del país, es inmenso, dorado y corona y vigila la ciudad de las havelis (típicas casas de princesa estilo rajastaní). 

Antes de cerrar por hoy y aunque ya se lo he mandado a ella, quiero poner este vídeo que me ha sacado alguna lagrimilla que otra esta mañana. Se lo dedico a mi madre, que aunque no mueve el culo para hacer deporte, sí que se pasa la vida intentando hacerlo todo lo mejor posible por los suyos (aunque a veces se ponga un poco pesadita, milita!). Como va a ser tu cumple dentro de un par de días, pues también te digo, GRACIAS y un besazo ;) Buen trabajo, milita!

P.D.: En la próxima edición ....

y el reencuentro de Carlos con su verdadera especie!!